Es curioso ver tu vida con perspectiva, desde un poco más lejos de lo normal y con un acercamiento ligeramente realista: vaya tragicomedia barata.
Hoy rescato y os comparto uno de los poemas oscuritos del año pasado y lo hago con una sonrisilla y pensando que menos mal que ya no estamos ahí, que del fondo -evidentemente- solo se podía subir.
P.
Pura recomendación: “Vox machina”
Dejando de lado que es de las mejores series de animación de la plataforma (al menos de producción original) y que vas a reírte y a gozar en un continuo vaivén entre escena absurda y somanta de palos bíblica, lo que hace totalmente original a Vox machina es que pocas series de televisión tienen un origen tan peculiar.
Por el 2015, un grupo de amigos comenzó a reunirse para jugar partidas de rol (dados, fichas, mesa, cerveza…), todos pertenecen al mundo del doblaje y acaban retransmitiendo sus noches de rol en vivo. La cosa empieza a funcionar por razones obvias (si te gusta el tema, investiga “Critical role”, es una joya) y acaban llevando a la pequeña pantalla una de las historias de sus partidas. Si tienes experiencia en partidas de rol, puedes hasta reconocer las pifias y los éxitos brutales durante el transcurso de la trama.
Me encantaría ser cualquiera de vosotros para no tener ni idea de esta serie y verla desde cero.
Os dejo también el trailer.
Volver a la vida
Volver al lugar del crimen.
Rehacer los pasos y admitir que has vuelto a hacerlo
anoche volviste
a correr de trinchera a trinchera
desobedeciendo todas las órdenes
bandera blanca en mano:
La vida es un simulacro sin ti.
No habían cesado las rotativas cuando lo vi
pude deshacer el crimen
pude no dejar huella de mi aventura
hacerte pensar que había sido una noche tranquila
o que puede haberlas.
Como un asesino en serie
atesoro recuerdos de los crímenes
y muero un poco al deshacerme de ellos
muero un poco al haber quitado una vida en vano
aun siendo la mía.
Fotos, marca páginas, ropa interior
un veinticuatro de junio de dos mil veinte mágico
lo único que me saca de la caverna
mi forma de ser momentáneamente feliz entre bambalinas
pequeños cadáveres que empiezan a deshacerse
para que yo pueda tener la oportunidad de volver a estar bien
para que yo pueda volver a la vida.
A la vida.
A la de quién.
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